Desde luego, difícilmente encontrarás en MotorAdictos un título tan
descriptivo y que resuma de forma práctica y sencilla los hechos que
ocurrieron en Vancouver, Canadá. Un accidente a alta velocidad donde un Audi A7 Sportback fue el máximo protagonista, y que acabó de la terrible manera en la que se aprecia arriba.
El resultado, sin embargo, es aún más espectacular… a pesar de lo
aparatoso del accidente y de que el A7 está totalmente partido en dos y
nisiquiera válido como chatarra, el conductor salió del accidente sin
lesiones graves. Ni siquiera acabó grave… ¡tal y como lo lees! Pero es
más, ya que parte -nunca mejor dicho- del A7 Sportback acabó en llamas,
lo cual dio aún más espectáculo al trágico suceso.
Como verás, este accidente nos da que pensar… y mucho. Un accidente
muy feo a simple vista y que parecía tener un final muchísimo más
trágico de lo que finalmente ocurrió. Un serio aviso para que el
conductor la próxima vez, cuide un poco más el pedal del acelerador.
No hay comentarios:
Publicar un comentario