Más concretamente, Daimler quiere posicionar a Mercedes-Benz como el primer fabricante de coches premium del mundo para el año 2020, fabricando unas 80.000 unidades anuales de su buque insigna, el Clase S. Entre otras cosas, Daimler no quiere que Maybach pueda mermar las ventas del nuevo Clase S que está por llegar, ya que según las declaraciones las oportunidades comerciales son mejores para la marca de la estrella de tres puntas.
Recordemos que sería la segunda vez que se da el cierre a Maybach, y en esta segunda vida que ha tenido no ha logrado alcanzar las espectativas de ventas creadas por la marca. En cualquier caso, no todo son malas noticia como cabría esperar tras el cierre de una marca, porque los 150 empleados que tiene Maybach actualmente no se irán al paro.
Y es que, como es obvio, para construir coches de la calidad de un Maybach, los empleados tienen una preparación y una cualificación sobresaliente, Daimler es consciente, es por ello por lo que los reubicará en Mercedes-Benz, suponemos que en labores de fabricación del nuevo Clase S, que contará con nada menos que seis variantes distintas y dos tipos de batalla.
Vía: EP
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