
Una de las novedades que llevará la citada división de BMW, será el Serie 3 Touring M Performance, que cuenta con diversos cambios respecto al tradicional, como pueden ser unos faldones laterales específicos, paragolpes delantero y posterior específicos, nuevas llantas de aleación, frenos sobredimensionados, entre otros. Ya en su habitáculo, encontramos pedales y reposapiés en acero inox, tapicería en alcántara, volante deportivo en cuero, abundante fibra de carbono, entre otros.
BMW M Performance también ha anunciado una reprogramación electrónica específica para el propulsor 320d (un 2.0 de 184 CV), que elevaría su potencia hasta los 200 CV, no es un aumento muy considerable pero se busca no comprometer la fiabilidad mecánica. ¿Por qué se ha elegido este propulsor? porque en la variante Touring, así como en la variante Sedán, es uno de los más exitosos de ventas.
Por otra parte, BMW no ha confirmado que incopore más cambios, aunque es de esperar también cambios en la altura o firmeza de la suspensión, así como una dirección con un tacto ligeramente diferente, acorde a la preparación del coche.
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