A estas alturas, todos tenemos muy claro que BMW va a por todas y no sólo en el mercado tradicional de turismos, sino también en el mercado emergente de eléctricos y coches alternativos. Es aquí, donde entra el futuro BMW i3 de producción.
Como su propio nombre indica, el BMW i3 estará basado en el prototipo
que lleva su propio nombre, buscando un nicho muy interesante en el
mercado y que aún está despertando. Los de Münich, pueden tener la clave
del éxito.
El i3 que tienes en pantalla porta un motor eléctrico localizado en el eje trasero, que ofrece una potencia neta de 167 caballos.
Junto a un peso apenas de 1.250 kilos, el i3 acelera de 0 a 100
kilómetros por hora en menos de 8 segundos, y tiene unos consumos
ridículos. Al fin y al cabo, no olvidemos que va a ser un coche 100%
eléctrico… a menos que se escoja con la opción de combustión interna.
BMW ofrecerá como opción un pequeño motor gasolina de cuatro tiempos,
que duplicará la autonomía del bávaro hasta un total de 300 kilómetros.
No impulsará al pequeño i3, sino que ayudará a recargar la batería y
extender el uso del motor eléctrico.
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